Cuidado de las plantas de lechuga
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La lechuga es famosa por su facilidad de cultivo. Es necesario mantener el suelo bien regado, especialmente en las semanas áridas, y apoyar su crecimiento con humus de lombriz o compost.
Puedes cosechar lechuga bebé para ensaladas y guarniciones, o esperar hasta que la planta crezca hasta 12" para cosechar una cabeza completa.
Las lechugas amontonadas parecen un ramo de flores, pero presentan muchos problemas. Si están demasiado juntas, retienen mucha humedad y compiten entre sí por la luz solar y los nutrientes, lo que podría provocar plagas o enfermedades. Recórtelas a 15 cm de distancia para que prosperen.
Con el calor del verano, la lechuga puede espigarse (florecer al final de su ciclo de vida). Cuando esto sucede, las hojas se vuelven extremadamente amargas a medida que se transfieren más nutrientes a la flor. Considere trasladar la planta al interior, a una zona bien iluminada, o buscar un lugar con sombra bajo un árbol para disipar el calor.
Considere también almacenarla en interiores durante el invierno, o contáctenos y pregunte sobre cómo pasar el invierno con sus plantas y devolverlas en primavera.
